En salud, la evaluación del impacto sanitario (EIS) es una combinación de procedimientos por los que una política, un programa o un proyecto pueden ser evaluados en relación a sus efectos sobre la salud.[1]Es decir, “la estimación de los efectos de una actuación específica sobre la salud de la población.”[2] Su fin es aumentar el beneficio de la capacitación sanitaria, aunque su finalidad no haya sido la mejora de la salud.
En definitiva, la EIS es una herramienta que sirve para tomar decisiones, de ahí su doble importancia, por una parte fomenta la creación de políticas exteriores y políticas públicas mundiales -en relación a sus resultados- y, por otro, acusa la repercusión de esas mismas políticas, también a nivel mundial.[3]

Existen varios modelos de Evaluación de Impacto. El de Kirkpatrick es uno de los principales, y se analizará a continuación siguiendo dos aspectos:
- descripción detallada del modelo,
- análisis crítico en base a ventajas e inconvenientes.
[1] Bacigalupe, Amaia, Esnaola, Santiago, Calderón, Carlos, Zuazagoitia, Juan; Aldasoro, Elena. (2008). La evaluación del impacto sobre la salud: una herramienta para incorporar la salud en las intervenciones no sanitarias. 06-09-2017, de Elsevier España, S.L. Sitio web: http://scielo.isciii.es/pdf/gs/v23n1/13_politica.pdf
[2] Scout-Samuel S. (1998). Healthimpactassessment: theoryintopractice. J EpidemiolCommHealth. 52:74–5.
[3] Scott-Samuel, Alex;O’Keefe,Eileen. (2007)Salud Evaluación del impacto sanitario, derechos humanos y política pública mundial: análisis crítico. Boletín de la Organización Mundial de la Salud, Volumen 85, 161-244.