Sujeto de derecho
El sujeto del derecho, o titular, es quien detenta el poder o la facultad de exigir esos derechos frente a otros (en este caso, frente al Estado).
El marco de los derechos humanos reconoce que todas las personas son sujetos o titulares de derechos. Ello implica que, desde un enfoque de derechos humanos, a las personas se les debe dotar y reconocer la mayor autonomía posible para ejercer sus derechos, dotándoles de “agencia” , lo que distingue al enfoque de derechos humanos de otros que ponen a ciertos grupos (niños/as, personas con discapacidad, adultos/as mayores, etc.) como objetos de protección y no como sujetos.
Sin embargo, existen situaciones en las que los sujetos de derechos se ven expuestos/as a un mayor grado de vulnerabilidad, lo que pone en riesgo la satisfacción y ejercicio pleno de sus derechos. Estas situaciones responden a diferentes factores, que podríamos agrupar en tres categorías:
Estos factores pueden combinarse, poniendo a las personas en un grado de vulnerabilidad aún mayor, como lo que ocurre con las mujeres con discapacidad que además pertenecen a un pueblo indígena o con los niños y niñas migrantes.