Aspectos generales
La Diabetes Mellitus (DM) es un desorden metabólico crónico, caracterizado por un aumento de la glicemia sanguínea (hiperglicemia) con alteraciones del metabolismo de los carbohidratos, grasas y proteínas, resultante de la disminución de la secreción y/o acción de la insulina. Su curso es progresivo, y se acompaña de lesiones microvasculares (retina, riñón, nervios) y macrovasculares (cerebro, corazón, extremidades inferiores), cuando no se trata adecuadamente la hiperglicemia y los factores de riesgo cardiovascular asociados (1).
La clasificación de la DM se basa en su etiopatogenia, incluye cuatro categorías de pacientes y un quinto grupo de individuos que tienen glicemias anormales que condicionan un alto riesgo de desarrollar DM:
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Diabetes Mellitus tipo 1.
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Diabetes Mellitus tipo 2.
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Otros tipos específicos de Diabetes.
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Diabetes Gestacional.
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Intolerancia a la glucosa y glicemia de ayunas alterada.
La Diabetes Mellitus Tipo 2 es la forma más frecuente, contemplando un 90 y 95% de los casos de la enfermedad (2). Si bien su prevalencia aumenta con la edad, puede aparecer en cualquier edad de la vida. El desarrollo de la DM Tipo 2 es la consecuencia de la incapacidad del páncreas endocrino de producir suficiente insulina para cubrir el incremento de su demanda debida a una menor respuesta o sensibilidad de los tejidos periféricos a la hormona (insulinorrersistencia) (2). Si bien la mayor parte de los pacientes logra un control metabólico adecuado mediante adopción de estilos de vida saludables (práctica regular de actividad física y plan de alimentación adecuada) e hipoglicemiantes orales, durante el transcurso de la enfermedad un porcentaje variable de pacientes puede requerir de tratamiento con insulina para lograr dicho control.
Las personas con DM Tipo 2 pueden presentar antecedentes familiares de DM, historia previa de DM desarrollada durante el embarazo, hijos recién nacidos con alto peso (mayores de 4,0 Kg, y abortos a repetición no provocados) y sedentarismo. La DM tipo 2 está asociada habitualmente con otros factores de riesgo cardiovascular: obesidad, hipertensión arterial y dislipidemia (niveles bajos de colesterol HDL y altos niveles de colesterol LDL y triglicéridos).
La glicemia de ayunas alterada (GAA) y la intolerancia a la glucosa o tolerancia a la glucosa alterada (TGA), son estadios previos a la manifestación clínica de la DM y si bien representan un riesgo para su desarrollo pueden permanecer como tales en el tiempo, revertir a la normalidad o progresar hacia la DM Tipo 2.